top of page
Buscar

Mejor posición para orar a Dios




¡Hola de nuevo! Que el eterno Dios te bendiga.


Hoy, nuevamente nos encontramos con una duda, que muchos podemos tener en algún momento de nuestra vida cristiana. ¿Debemos orar a Dios de rodillas, de pie o postrados? Probablemente estemos buscando la mejor posición para orar, porque queremos mejorar nuestra comunión con Dios cada vez que nos dirigimos a él, y eso es simplemente maravilloso.


La respuesta rápida es: La posición de nuestro cuerpo, cuando oramos a Dios, no tiene más relevancia que nuestra actitud espiritual. Humildad, sencillez y gratitud son más importantes que la posición de nuestro cuerpo cuando hablamos con Dios.

Pero, ¿Qué tal, si vemos: Cómo oraban los hombres y mujeres de Dios mencionados en la Biblia y aprendemos de ello?




1 DE RODILLAS


En La biblia encontramos muchos ejemplos de personas orando de rodillas, como Pedro, cuando oró a Dios por la resurrección de Dorcas (Hechos 9:40) o en su discurso de despedida en Mileto donde se nos relata: "cuando hubo dicho estas cosas, se puso de rodillas, y oró con todos ellos" (Hechos 20:36) El profeta Daniel también oraba de rodillas 3 veces al día (Daniel 6:10) También Esteban, quien justo antes de morir, cayó de rodillas y clamando a gran voz dijo: "Señor, no les tomes en cuenta este pecado" (Hechos 7:60).


Esta posición es una de las más comunes en la actualidad, refleja humildad, nos arrodillamos en señal de ruego, de súplica, pero también dando honor al Dios Poderoso a quien nos dirigimos. Aunque no era la más usada en la antigüedad si era bastante común por los hombres de Dios desde aquella época y hasta ahora. Sin duda una excelente opción.





2 DE PIE

La práctica más común en las escrituras, acerca de la posición para orar, es estando de pie ante Dios. En 2 Crónicas 20, por ejemplo, se narra un hecho en el que el pueblo de Israel permaneció de pie junto a Josafat, mientras clamaban a Dios pidiendo auxilio por la gran multitud que venía contra ellos, Dios, al escuchar el clamor de todo Israel, respondió y les dijo a través del profeta: "No teman, ésta guerra no es suya, sino de Dios".


Me ha pasado, que he iniciado una oración de rodillas, pero en un punto no puedo permanecer así y me pongo de pié y sigo adorando, clamando, agradeciendo, levanto mis manos al cielo y me siento libre, libre de mis cargas, libre de mis angustias, libre de mi aflicción. Recuerda que todo tiene que ver con la comunión que estás teniendo con Dios en ese momento.


Sin duda, en lo personal, me encanta orar de pie.




3 POSTRADO

Esta posición es diferente a como la mayoría la imaginamos. Comúnmente se piensa, que es de rodillas con la cabeza tocando el suelo, como la imagen de arriba. Pero, postrarse, en la antigüedad y aún en algunas culturas y religiones actuales es con tu cuerpo totalmente sobre el suelo y las manos hacia adelante, como nos muestra la siguiente imagen:



Esta posición está en la Biblia en algunos ejemplos, aunque pocos, importantes:

Jesús, estando cerca la hora de su arresto, se fue a un lugar llamado Getsemaní con sus discípulos. Estando ahí, les dijo que esperaran mientras él siguió con Pedro, Jacobo y Juan, a quienes dijo que estaba muy triste, hasta la muerte, que velaran con él. Era un momento de mucha angustia en la vida de Jesús, ya que estaba pronta la hora de su sacrificio en la cruz. Dice su palabra: "Yendo un poco adelante, se postró sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si es posible, pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú." (Mateo 26:39)


El capítulo 20 del segundo libro de Crónicas, en la misma historia de Josafat que vimos al principio, nos narra cómo todo el pueblo de Israel se postró ante Jehová para adorar y Dios hizo un gran milagro de Salvación, como les había prometido. (2 Crónicas 20:18)


Postrarse ante Jehová es la más grande señal de reverencia, si nunca lo has intentado, te invito a hacerlo, en tu habitación, a solas con Dios, en un momento de intimidad con él.



Aunque es esta posición, en comparación a las otras, la que refleja más humildad ante el ser supremo que nos sustenta, debemos tener siempre presente que, lo más importante al dirigirse a Dios, es la actitud de nuestro corazón.


En nuestras congregaciones hemos visto personas que les gusta orar en distintas posiciones, al igual que nosotros mismos hemos orado sentados, de pie, de rodillas e incluso algunas veces acostados antes de dormir o al despertar, o cuando estamos enfermos.


No existe una posición específica para orar. Ora en una posición en la que te sientas en comunión con Dios dependiendo del lugar y la situación. Recuerda, acercarte a Dios con humildad y sinceridad es lo mas importante.




Entradas recientes

Ver todo
bottom of page